19 de agosto de 2011

Pierre Quinon: in Memoriam.

Como ya habréis leído, Pierre Quinon, campeón olímpico de salto con pértiga en 1984, se quitó la vida el pasado miércoles 17 de agosto arrojándose desde la ventana de su casa: tenía 49 años. Según sus allegados estaba deprimido, tomaba bastante medicación y tenía problemas de alcoholismo desde hacía algunos años.

Un saltador de talento.
Miembro de la magnífica escuela de salto con pértiga que fueron forjando desde los sesenta en París Maurice Houvion y Jean-Claude Perrin, el joven Pierre había nacido en Lyon (20 febrero 1962) y se había iniciado en un club comarcal, el Rhodia (su padre había sido corredor de 800m). Se incorporó en 1981 al grupo de Perrin en el Racing de París, en el que destacaban Patrick Abada, Jean-Michel Bellot y Thierry Vigneron. Esa temporada ya fue subcampeón de Europa junior con 5,30m, tras el checoslovaco Frantisek Jansa (5,35).
Quinon, que tenía fama de ser un muchacho solitario, demostró desde joven resistir muy bien la presión de la competición. En 1982 mejoró hasta 5,70 y se impuso en los campeonatos franceses sub-23 y absolutos, algo nada sencillo dado el nivel de los galos. Seleccionado para el Europeo, en Atenas acabó 12º tras un salto de 5,35 y tres nulos entre 5,55 y 5,60, demostrando su ambición y osadía. Las medallas fueron para los soviéticos Aleksandr Krupskiy y Vladimir Polyakov y para el búlgaro Atanas Tarev, todos con 5,60m.

Plusmarquista mundial.
En 1983 igualó el record francés de Vigneron (5,80, que habían sido RM). Pero en el primer Campeonato del Mundo fracasó haciendo tres nulos (ganó otro chaval desconocido, un tal Sergey Bubka con 5,70). Apenas catorce días después en Colonia batió por un centímetro el RM de Polyakov, al pasar a la primera la barra a 5,82m (para la anécdota queda que fue el primero en ponerla a 6 metros, fallando sus tres intentos). Tres días después su compatriota Vigneron se lo arrebató en Roma, también por un centímetro.
¡Campeón olímpico!
Empezó el año olímpico con una plata en el Europeo indoor (5,75) de Göteborg, tras un gran Vigneron (5,85). Campeón francés por tercer año consecutivo, entró lógicamente en el trío para Los Angeles, junto a Vigneron y Serge Ferreira. Era una gran ocasión para ellos, ya que el boicot de los países del bloque soviético dejó en casa a Bubka y los polacos, aunque sobre los pupilos de Perrin recaía el sanbenito de "encogerse" en los grandes eventos.
El 8 de agosto Quinon debutó con un nulo en 5,45m , pasando a la segunda. En ese momento permanecían seis atletas más en liza pero sólo quedaban tres (Vigneron y los locales Tully y Bell) cuando volvió al pasillo. Hizo un nulo en 5,65 y se reservó sus otros intentos para 5,70. En esa barra estuvo la clave ya que la pasó a la primera, mientras Earl Bell y Vigneron marraban sus tres intentos (se quedaban con 5,60). Mike Tully, que había saltado a la tercera 5,65, no probó y tampoco lo hizo cuando vio que Quinon saltaba en su primera tentativa los 5,75.
Con el título casi en el bolsillo, Quinon acompañó a Tully en sus desesperados intentos sobre 5,80 (el veterano americano había batido días antes el record USA con 5,82), que resultaron baldíos para ambos. Ante la sorpresa de los propios franceses (que confíaban más en Vigneron) Pierre Quinon se convirtió en el primer campeón olímpico de la escuela francesa (el siguiente sería Jean Galfione en 1996): era el octavo oro francés en atletismo, y el primero en un salto. Sergey Bubka tenía el RM en 5,90 y antes de acabar la temporada lo dejaría en 5,94.
Una continuación difícil.
En 1985 Quinon alcanzó su plusmarca personal en Niza (5,90 tras Bubka, 5,95) y acabó 2º del Grand Prix. Fue su canto del cisne ya que una lesión en el tobillo, sus estudios y, al parecer, una insuficiente asiduidad en los entrenamientos le llevaron a estancarse en torno a 5,70m. No será seleccionado para Seúl-88 (irán Philippe Collet, Philippe d´Encausse y Vigneron, arrasados por la armada roja de la URSS).
Sin resultados, Quinon se retiró en 1992 y abrió un negocio de pollos asados en Hyères, la localidad en la que residió hasta su muerte. En 2005 conoció al artista abstracto Colin Raffer y empezó a pintar. Admiraba a Nicolas de Stäel y Jackson Pollock y expuso sus obras en varias salas de su región. Hace un mes había estado navegando con su amigo Jean Galfione que, tras su retirada de las pistas, ha entrado en el mundo de la vela profesional.

4 comentarios:

  1. SALUDOS:

    GRACIAS POR ESTE COMPLETO ARTÍCULO.

    SIN MÁS:

    JOAQUÍN CARMONA TORRE

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  2. Hola paul.
    ¿Te interesan 14 nùmeros de Miroir de l'athletisme de los años 70-72,todos por 15 euros,màs gastos de envìo?
    Un Saludo.

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  3. Claro que sí ¿nos escribimos en el correo?

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  4. Hola,Paul Martin.
    Ya te he mandado un mensaje.Si estàs de acuerdo envìame tu direcciòn.Pero debe ser hoy.
    Un saludo.

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